Este poema filosófico, parte de la premisa de que la existencia de un universo ordenado en un Cosmos, requiere un lenguaje y no sólo un lenguaje sino un refinado lenguaje. Cuanto más refinado y potente es el lenguaje, tanto más rico es el Cosmos y la estabilidad de su orden. En un hipotético estado de naturaleza, el hombre vive sometido a los poderes del Caos, sin comprensión, sin sentido, sin reposo y sin refugio. Pero la fuente misma del bien participa de una misma esencia con el lenguaje, que saca al hombre de su estado de brutalidad irresponsable y lo hace hombre: algo que puede actuar como dueño de sus actos. Sin embargo, cuando el lenguaje se degrada, la estabilidad del universo se rompe y el Cosmos se derrumba en el Caos, que parece ser algo diferente de lo que había antes de haber Cosmos, porque el concepto de Caos se configura como opuesto de un mundo que se nos da previamente ordenado. Por lo tanto el Caos es la degradación del orden en una estado de imprevisible y destructora corrupción. El síntoma más relevante de que el mundo ordenado en un todo inteligible se está resquebrajando, es el declive del lenguaje. Cuando el lenguaje decae, el mundo se dirige a la barbarie. Durante eones, todo se sometió al yugo incomprensible del Caos. Prenda del bien y con poderoso imperio, el Lenguaje erigió el Cosmos, el Universo ordenado, con la sustancia inefable del Caos. El devenir de las edades, degeneró el lenguaje en instrumento de concepciones vacuas, impotentes ante el Caos, desintegrando la estructura del Cosmos. Mientras la realidad se derrumba, surgen los héroes del crepúsculo, los campeones de un mundo demolido. Muchos son sus hechos de armas y sus blasfemias; ellos contemplan con placer la infamia del derrumbe y de la desintegración.
Escribo para contar que estoy publicando en Amazon.com un libro sobre un héroe fáustico, una epopeya de las tinieblas, se trata de una obra que desarrolla una doctrina sobre el caos y la decadencia del cosmos, así como las condiciones que lo hacen posible. Se llama THERION - El Sendero del Caos: Aurora y Ocaso de un Cosmos (Spanish Edition) Kindle Edition
Este poema filosófico, parte de la premisa de que la existencia de un universo ordenado en un Cosmos, requiere un lenguaje y no sólo un lenguaje sino un refinado lenguaje.
Cuanto más refinado y potente es el lenguaje, tanto más rico es el Cosmos y la estabilidad de su orden.
En un hipotético estado de naturaleza, el hombre vive sometido a los poderes del Caos, sin comprensión, sin sentido, sin reposo y sin refugio.
Pero la propia fuente del bien participa de una misma esencia con el lenguaje, que saca al hombre de su estado de brutalidad irresponsable y lo hace hombre: algo que puede actuar como dueño de sus actos.
Sin embargo, cuando el lenguaje se degrada, la estabilidad del universo se rompe y el Cosmos se derrumba en el Caos, que parece ser algo diferente de lo que había antes de haber Cosmos, porque el concepto de Caos se configura como opuesto de un mundo que se nos da previamente ordenado. Por lo tanto el Caos es la degradación del orden en una estado de imprevisible y destructora corrupción.
El síntoma más relevante de que el mundo ordenado en un todo inteligible se está resquebrajando, es el declive del lenguaje. Cuando el lenguaje decae, el mundo se dirige a la barbarie.
La épica del horror, el canto de los héroes de las tinieblas, está marcado por un intenso sesgo filosófico. Toda su carga apunta hacia la decadencia del mundo ordenado, en conjunto con la decadencia del lenguaje.
Dedicado a Paco: Literatura
Libro disponible en: https://www.amazon.com/dp/B075WDF7JV/ref=sr_1_5?ie=UTF8&qid=1506272553&sr=8-5&keywords=el+sendero+del
"Por un poder más hondo todavía que cuantos invoqué, potente encanto nacido en una estrella condenada, resto ardiente de un mundo demolido, infierno errante en el eterno espacio; por la cruel voluntad que hay en mi alma y por el pensamiento que está dentro de mí, y en derredor de mí, yo os mando cumplir mi voluntad."
Lord Byron - Manfredo
2. Therion - El sendero del Caos - Proemio
PROEMIO
A tí, musa radiante, que alumbraste mi alma con el ardiente rayo de tu juicio severo, solicito el favor, el poder, las palabras y el preciso rigor con que cantarte quiero.
Canta musa, en mis labios, con tu justicia airada el canto que mis padres entonaron tan fieros: la canción del combate donde arde mi alma templando en el coraje mi corazón de acero.
Oh tú, mi diosa indigna, mi dama venerada que derramas tus haces de luz sobre mi abismo, recibe estas canciones con mi sangre regadas como si fueran flores que sembró mi cinismo
y tendrás tu cosecha de hiel asegurada, porque me has defraudado tanto como he insistido queriendo que seas noble, como yo soy la espada que dirigir no puedes hacia un futuro frívolo.
Espacio de discusión polítca. Análisis filosófico. Combate a la retórica y a la sofística. Política internacional. América latina. Europa. Estados Unidos. Posmodernidad. Neomarxismo. Progresismo. Ideología de género. Feminismo. Micro-feminismo. Movimientos supremacistas. Izquierda y derecha. Capitalismo, socialismo, marximo, leninismo, anarquismo, liberalismo.
Creado por ®Edgard
Libro disponible en: https://www.amazon.com/dp/B075WDF7JV/ref=sr_1_5?ie=UTF8&qid=1506272553&sr=8-5&keywords=el+sendero+del
PRÓLOGO Durante eones, todo se sometió al yugo incomprensible del Caos. Prenda del bien y con poderoso imperio, el Lenguaje erigió el Cosmos, el Universo ordenado, con la sustancia inefable del Caos. El devenir de las edades, degeneró el lenguaje en instrumento de concepciones vacuas, impotentes ante el Caos, desintegrando la estructura del Cosmos. Mientras la realidad se derrumba, surgen los héroes del crepúsculo, los campeones de un mundo demolido. Muchos son sus hechos de armas y sus blasfemias; ellos contemplan con placer la infamia del derrumbe y de la desintegración. El presente poema narra sus herejías y celebra sus iniquidades.
Espacio de discusión polítca. Análisis filosófico. Combate a la retórica y a la sofística. Política internacional. América latina. Europa. Estados Unidos. Posmodernidad. Neomarxismo. Progresismo. Ideología de género. Feminismo. Micro-feminismo. Movimientos supremacistas. Izquierda y derecha. Capitalismo, socialismo, marximo, leninismo, anarquismo, liberalismo.
Espacio de discusión polítca. Análisis filosófico. Combate a la retórica y a la sofística. Política internacional. América latina. Europa. Estados Unidos. Posmodernidad. Neomarxismo. Progresismo. Ideología de género. Feminismo. Micro-feminismo. Movimientos supremacistas. Izquierda y derecha. Capitalismo, socialismo, marximo, leninismo, anarquismo, liberalismo
El
pensamiento que subyace al comunismo y que lo sostiene, es el de que
la agencia colectiva tiene prevalencia sobre la legitimación y la
eficacia individual del discurso y de la acción. Esto equivale a
pensar que las hienas por andar en manadas, prevalecerán sobre los
leones.
Los
patrones de acción, de identificación y de legitimación colectivos
buscan solamente la imposición de reglas, posturas y discursos al
amparo de la fuerza crítica que supone encontrarse en el grupo de
mayor número. Esto supone un hecho material y contingente.
Como
procesos colectivos, su determinación es siempre material y
contingente, no necesaria, porque los movimientos colectivos proceden
de complejos procesos de auto-ordenamiento resultantes de
los acuerdos que contraen sus miembros. Por tanto un posicionamiento
colectivo será siempre un resultado contingente, nunca una
necesidad.
Ahora
bien, si las reglas de la acción necesaria son las que determinan la
forma fáctica de la bondad, entonces las formas de normalización
colectiva, como resultados contingentes, son lo opuesto a la bondad.
Formas
de acción colectiva son los movimientos posmodernos, el comunismo,
el marxismo cultural, la mente de colmena, el piélago de insectos
que desea arrasarlo todo. Los verdaderos enemigos de la humanidad,
las almas de rebaño.
El
rechazo por las manadas es la postura natural del que se siente
noble.
1. Antes de que el universo se
descomponga en cosas, antes de que la separación consiga dividirlo
todo, con orden o sin él, antes de que tengamos clasificaciones, aún
antes, existe algo que no el concepto de existencia nos permite
aprehender.
2. En el perfecto <<sin
lenguaje>> reside todo lo que no se puede pensar.
3. Si hablar es pensar, entonces todo
lo que puede hablarse es pensamiento, por lo tanto, nada de lo que
puede decirse se encuentra fuera del pensamiento. Consecuentemente,
si el pensamiento es diferente de lo que existe por si mismo, y todo
lo que puede decirse remite al pensamiento, entonces nada puede
decirse sobre lo que existe con independencia del pensamiento.
4. A esto que existe con
indenpendencia de lo que puede pensarse, permítaseme llamarle
<<voluntad>>, porque esta palabra evoca un rasgo de la
existencia que no puede definirse realmente, pudiéramos llamarle
<<espíritu>> asumiendo que no se cuerpo ni mente.
5. Hemos establecido un algo, exterior
al lenguaje, inefable: que no puede pensarse con palabras. Le
llamamos <<voluntad>>.
6. Al imperio o mandato, que nos
reclama desde y hacia una forma inefable, a un ego disuelto, a un
pasado improbable, al desdén de la ilusión, a un pensamiento
liviano como la luz del sol, que se derrama sobre el valle, a esto
llamo <<voluntad>>.
7. Y, al decir <<voluntad>>,
no denoto un objeto de nuestro lenguaje: evoco algo que no puede
nombrarse.
8. Cuando pensamos que no puede
nombrarse, este pensamiento no puede legarse, no puede transferirse,
no puede comunicarse, porque nos transporta fuera del lenguaje.
9. Al llegar a este pensamiento, el
velo de la ilusión se corre, exponiendo la evocación de una esencia
absoluta, que no puede nombrarse.
El
pensamiento que subyace al comunismo y que lo sostiene, es el de que
la agencia colectiva tiene prevalencia sobre la legitimación y la
eficacia individual del discurso y de la acción. Esto equivale a
pensar que las hienas por andar en manadas, prevalecerán sobre los
leones.
Los
patrones de acción, de identificación y de legitimación colectivos
buscan solamente la imposición de reglas, posturas y discursos al
amparo de la fuerza crítica que supone encontrarse en el grupo de
mayor número. Esto supone un hecho material y contingente.
Como
procesos colectivos, su determinación es siempre material y
contingente, no necesaria, porque los movimientos colectivos proceden
de complejos procesos de auto-ordenamiento resultantes de
los acuerdos que contraen sus miembros. Por tanto un posicionamiento
colectivo será siempre un resultado contingente, nunca una
necesidad.
Ahora
bien, si las reglas de la acción necesaria son las que determinan la
forma fáctica de la bondad, entonces las formas de normalización
colectiva, como resultados contingentes, son lo opuesto a la bondad.
Formas
de acción colectiva son los movimientos posmodernos, el comunismo,
el marxismo cultural, la mente de colmena, el piélago de insectos
que desea arrasarlo todo. Los verdaderos enemigos de la humanidad,
las almas de rebaño.
El
rechazo por las manadas es la postura natural del que se siente
noble.
Definicion: Una
república es una forma de organización y de gobierno del
estado donde el ejercicio del poder recae en los
ciudadanos. Es lo opuesto a la tiranía, a la concentración
del poder en manos de una minoría.
Primero, en una
república, la ley gobierna a través de las instituciones.
Segundo, en un sistema
de gobierno republicano, se intenta combinar la garantización de
la libertad individual de cada ciudadano con la producción de la
riqueza.
OBS: Con libertad y
riqueza, eventualmente puede desarrollarse el gobierno de los
mejores, esto es la aristocrácia.
El ejercicio del poder
(GOBIERNO) es la participación activa en la gestión del estado.
El
estado
es el proceso resultante, orientado a una cierta forma de vida
cívica, que es resultado complejo y variable en el tiempo de
factores convergentes de naturaleza cívica, territorial, política y
cultural estructurados en forma de instituciones, que son las formas
materiales en que se brinda a los ciuadadanos el amparo de la ley.
Monarquía (PODER O PRIMACÍA)>
Tiranía
Aristocrácia (VIRTUD)> Oligarquía
(RIQUEZA)
Democrácia (LIBERTAD)> Demagogia
La república intenta incluir las
virtudes de estas tres formas de gobierno para eliminar sus versiones
degradadas. Para participar activamente y eficientemente en la
gestión del estado, un ciudadano debe tener garantizadas tres
condiciones necesarias
a- libertad
b- propiedad
c- institucionalidad del estado
2)
Porqué soy Repúblicano
Primero,
propongo el siguiente argumento o secuencia de consideraciones:
I
- Si existe un ciudadano x, tal que este ciudadano es soberano (un
individuo libre que no tiene que pedir permiso para existir, que
recibe las consecuencias de procesos que protagoniza al menos
parcialmente), entonces este ciudadano debe participar activamente en
la gestión de los asuntos del estado.
II
- Porque, si la gestión de los asuntos del estado tiene
consecuencias para la existencia soberana de un ciudadano x, tal que
pertenece al estado, entonces este ciudadano es soberano (dueño de
su existencia), siempre y cuando participe en la gestión del estado,
ya que si no participa en la gestión del estado, entonces
simplemente recibe las consecuencias de gestiones totalmente
realizadas por otros. Y esto equivale a ser objeto de una tiranía, a
estar sometido y no ser soberano.
III
-Por lo tanto, si la soberanía de la existencia es la condición
bajo la cual un ciudadano se involucra activamente en la gestión del
estado, entonces se desprende (por la regla lógica del modus
tollens) que un ciudadano que no participa activamente de la gestión
de los asuntos del estado no es soberano, no es libre de existir sin
tener que pedir permiso y solo recibe consecuencias estatales de
acciones de terceros.
Segundo,
desde mi punto de vista, la postura más racional, es desear
participar de la gestión de los procesos cuyas consecuencias se
reciben, porque es la única forma de promover los resultados
deseables y de evitar los resultados indeseables bajo una determinada
ética. Esta participación ciudadana sólo es posible en el régimen
de la república, porque es el único que se propone garantizar a los
ciudadanos la libertad y la riqueza suficiente para que puedan
participar activamente en los asuntos del estado.
Por
lo tanto la república es la forma de organizar el estado más
racional, consiguientemente, la más deseable.
3)
Consecuencia: Rechazo del totalitarismo
Diré
sucintamente, que los movimientos posmodernos que componen el
progresismo, son la redefinición del marxismo en términos
culturales. O sea, suponen la traslación de la doctrina
totalitarista marxista al terreno de la cultura. Han redefinido la
metodología revolucionria en una pedagogía de izquierda, que
adoctrina a los ciudadanos en las categorías del marxismo cultural.
En
las entradas anteriores, establecí mi rechazo por el totalitarismo
cultural, implantado tras la revolución cultural.
La
causa de este rechazo es fácil de comprender, como ciudadano, veo mi
soberanía personal comprometida por los movimientos totalitarios que
han encontrado en la cultura el terreno donde desarrollar sus
políticas de tiranía colectiva y de consiguiente supresión de la
libertad individual.
¿Por
qué? Porque la revolución cultural tiene como propósito la
inversión sistemática de los valores culturales tradicionales.
Esto
significa que mis valores republicanos basados en apego a la
soberanía sobre mi propia existencia individual y la forma en que
personalmente quiera definirla, en el marco de los derechos que me
otorga mi calidad de ciudadano con determinadas libertades
individuales, para el revolucionario cultural deberían ser
invertidos.
Si
una inversión tal se produjese, yo dejaría de ser el soberano de mi
existencia y de la forma en que yo quiera definirla. Me transformaría
en una agente de revolución cultural, impulsor de un esquema
totalitario de comportamientos y de valores, basado en un paradigma
colectivista y relativista, por lo tanto irracional y sofístico.
No
puedo más que rechazar este totalitarismo que desea privarme de mis
posibilidades de ser libre, de guiarme por mi propia racionalidad (no
por la coerción colectiva), y de poseer mi propia riqueza, para
desde esta base, desarrolar en excelencia las posibilidades de mi
virtud.
Yo
rechazo el marxismo porque es enemigo de la razón, de laverdad, de
la libertad y de la virtud.
Bibliografía:
PLATÓN
- "La República" - 1941 AUSTRAL
ARISTÓTELES
- "Política" - 1941 AUSTRAL
ORTEGA
Y GASSET - "La rebelión de las masas" - 1937 AUSTRAL
Diré
sucintamente, que los movimientos posmodernos que componen el
progresismo, son la redefinición del marxismo en términos
culturales. O sea, suponen la traslación de la doctrina
totalitarista marxista al terreno de la cultura. Han redefinido la
metodología revolucionria en una pedagogía de izquierda, que
adoctrina a los ciudadanos en las categorías del marxismo cultural.
En
las entradas anteriores, establecí mi rechazo por el totalitarismo
cultural, implantado tras la revolución cultural.
La
causa de este rechazo es fácil de comprender, como ciudadano, veo mi
soberanía personal comprometida por los movimientos totalitarios que
han encontrado en la cultura el terreno donde desarrollar sus
políticas de tiranía colectiva y de consiguiente supresión de la
libertad individual.
¿Por
qué? Porque la revolución cultural tiene como propósito la
inversión sistemática de los valores culturales tradicionales.
Esto
significa que mis valores republicanos basados en apego a la
soberanía sobre mi propia existencia individual y la forma en que
personalmente quiera definirla, en el marco de los derechos que me
otorga mi calidad de ciudadano con determinadas libertades
individuales, para el revolucionario cultural deberían ser
invertidos.
Si
una inversión tal se produjese, yo dejaría de ser el soberano de mi
existencia y de la forma en que yo quiera definirla. Me transformaría
en una agente de revolución cultural, impulsor de un esquema
totalitario de comportamientos y de valores, basado en un paradigma
colectivista y relativista, por lo tanto irracional y sofístico.
No
puedo más que rechazar este totalitarismo que desea privarme de mis
posibilidades de ser libre, de guiarme por mi propia racionalidad (no
por la coerción colectiva), y de poseer mi propia riqueza, para
desde esta base, desarrolar en excelencia las posibilidades de mi
virtud.
Yo
rechazo el marxismo porque es enemigo de la razón, de laverdad, de
la libertad y de la virtud.
Bibliografía:
PLATÓN
- "La República" - 1941 AUSTRAL
ARISTÓTELES
- "Política" - 1941 AUSTRAL
ORTEGA
Y GASSET - "La rebelión de las masas" - 1937 AUSTRAL
Primero,
propongo el siguiente argumento o secuencia de consideraciones:
I
- Si existe un ciudadano x, tal que este ciudadano es soberano (un
individuo libre que no tiene que pedir permiso para existir, que
recibe las consecuencias de procesos que protagoniza al menos
parcialmente), entonces este ciudadano debe participar activamente en
la gestión de los asuntos del estado.
II
- Porque, si la gestión de los asuntos del estado tiene
consecuencias para la existencia soberana de un ciudadano x, tal que
pertenece al estado, entonces este ciudadano es soberano (dueño de
su existencia), siempre y cuando participe en la gestión del estado,
ya que si no participa en la gestión del estado, entonces
simplemente recibe las consecuencias de gestiones totalmente
realizadas por otros. Y esto equivale a ser objeto de una tiranía, a
estar sometido y no ser soberano.
III
-Por lo tanto, si la soberanía de la existencia es la condición
bajo la cual un ciudadano se involucra activamente en la gestión del
estado, entonces se desprende (por la regla lógica del modus
tollens) que un ciudadano que no participa activamente de la gestión
de los asuntos del estado no es soberano, no es libre de existir sin
tener que pedir permiso y solo recibe consecuencias estatales de
acciones de terceros.
Segundo,
desde mi punto de vista, la postura más racional, es desear
participar de la gestión de los procesos cuyas consecuencias se
reciben, porque es la única forma de promover los resultados
deseables y de evitar los resultados indeseables bajo una determinada
ética. Esta participación ciudadana sólo es posible en el régimen
de la república, porque es el único que se propone garantizar a los
ciudadanos la libertad y la riqueza suficiente para que puedan
participar activamente en los asuntos del estado.
Por
lo tanto la república es la forma de organizar el estado más
racional, consiguientemente, la más deseable.
Definicion: Una
república es una forma de organización y de gobierno del
estado donde el ejercicio del poder recae en los
ciudadanos. Es lo opuesto a la tiranía, a la concentración
del poder en manos de una minoría.
En un sistema de
gobierno republicano, se intenta combinar la garantización de la
libertad individual de cada ciudadano con la producción de la
riqueza.
OBS: Con libertad y
riqueza, eventualmente puede desarrollarse el gobierno de los
mejores, esto es la aristocrácia.
El ejercicio del poder
es la participación activa en la gestión del estado.
El
estado
es el proceso resultante, orientado a una cierta forma de vida
cívica, que es resultado complejo y variable en el tiempo de
factores convergentes de naturaleza cívica, territorial, política y
cultural estructurados en forma de instituciones, que son las formas
materiales en que se brinda a los ciuadadanos el amparo de la ley.
Cuando ya más allá de todo un hombre
Contempla y entiende el curso de la vida,
Ser feliz logra; mas aquel que ante los peligros tiembla
Escomo un hombre que por vientos y tempestades fuera dominado.
Mejor es conocer la belleza,
Sublime creación de la vida.
Cuando de lo más hondo de los afanes nace el gozo
Y cuantos bienes hoy pueden desearse.
El árbol que verdea,las cumbres del ramaje,
Las flores que rodean la corteza del tronco,
Naturaleza divina son y vida
Al inclinarse sobre ellos los aires del cielo.
Mas cuando curiosos los hombres me preguntan
lo que aquello es, qué sentimiento aventurado,
Qué destino, qué cénit o qué premio,
Yo les contesto,ésa es la vida y ése el pensamiento.
A otros la Naturaleza de ordinario sosiega,
Pero a mí me insta ante la posibilidad de una vida gozosa,
Esa claridad ante la cual hasta los sabios se estremecen,
Ese gozo hermosísimo, cuando ya todo es alegría.
El rigor de los hombres,la victoria y los peligros,
Origen tienen en lo aprendido y en la seguridad
De que existe una meta;aquello que sobre todo es sublime
Se reconoce en el ser y en los hermosos restos.
Ellos mismos son como elegidos,
De ellos es lo nuevo, lo narrado,
La verdad delos hechos no perece,
Y como las brillantes estrellas, una vida alegre y grande existe.
La vida es acción,y es audaz,
Alto su objetivo, su movimiento contenido,
Avanza,la bondad está hecha de virtud
Y gran rigor,llena de la juventud más pura.
El arrepentimiento y el pasado en esta vida
Son diferentes. Uno logra
Gloria y paz y todo cuanto eleva
A las altas regiones otorgadas;
El otro es la congoja y los más amargos sufrimientos
En la muerte de esos hombres que con la vida bromeaban.
Y la imagen y el semblante cambian
En aquel que no amó ni el bien ni la belleza.
La evidencia de un cuerpo viviente, perdurar
En este tiempo, tal como los hombres ansían,
Querella fuese, pues éste del sentimiento nútrese,
E inclinado aquel se siente por la creación y el esfuerzo.
Strange, I see the icy moon collapse
which will be the pleasure of falling enormous joy.
As I understand everything leans tenderly
on the white curve of celestial globes.
Here, under these trees at height,
It come on earth to rest the rain
and I get up from tomb my face,
like a snout whitish teeth.
I repelled everything that breathes ...
when I put my hands on your hot skin
at the same time I felt sorry, warmth and torture
and my skin burned by a fiery comet .
Now that the cosmos into chaos collapses,
I feel the last called, which calls me shortly.
Goodbye, it is the end. A song from grave
time slows and gradually stops it.
El estado de derecho es el proceso
resultante, orientado a una cierta forma de vida cívica, que es
resultado complejo y variable en el tiempo de factores convergentes
de naturaleza cívica, territorial, política y cultural
estructurados en forma de instituciones, que son las formas
materiales en que se brinda a los ciudadanos el amparo de la ley.
Las instituciones son el resultado
fáctico y orgánico, de las formas establecidas por el soberano, en
que se organiza la vida cívica.
En el estado moderno, el soberano es
(al menos en teoría) el pueblo, o la sumatoria de los ciudadanos
individuales.
Por lo tanto, las instituciones son la
forma en que el pueblo, soberano, o conjunto de los ciudadanos
individuales, ha organizado su vida cívica.
Las instituciones son más simples o
más complejas, son más o menos materialmente contrastables (ej, el
poder judicial) o son más bien intangibles como la noción de
"libertad individual".
La base de nuestras instituciones es
el intangible concepto de la "libertad individual", el cual
sin embargo tiene un registro amplio de contrastación empírica o
material en relación a nuestra experiencia psíquica.
II - La destrucción del estado de
derecho: la corrección política y la censura
Por lo tanto, cualquier agresión a
las libertades individuales o a las instituciones que las garantizan
es una agresión al soberano, aunque sea realizada por un grupo
mayoritario.
Por ejemplo: el ciudadano de un estado
donde sólo puede decirse lo que permite la censura no es libre, el
ciudadano que tiene que pedir permiso para existir (como ocurre en
los regímenes totalitarios) no es libre y ha sido agredido en sus
libertades individuales él mismo, como el propio soberano del que
forma parte.
La estrategia global de los grupos que
atacan el estado de derecho es erosionar, infiltrar e invertir los
valores culturales que existen al amparo del estado de derecho, para
eliminar la necesidad del derecho y sustituirlo por el totalitarismo,
donde el estado, ya no de derecho sino de facto, usurpa toda la
soberanía que antes era de los ciudadanos.
Digamos que el estado de derecho o
gobierno de la ley, que garantiza nuestras posibilidades de ejercer
nuestra libertad individual puede ser atacado con tácticas de acción
directa sobre nuestro campo de acción o de reacción frente a la
acción libre.
La táctica directa de ataque al
estado de derecho consiste en adiestrar a los individuos en una
doctrina de agresión e intolerancia hacia el estado de derecho y el
ejercicio libre de los derechos naturales que debe gozar un ciudadano
bajo el amparo de la ley. Esta estrategia se implementa mediante el
adiestramiento en la "corrección política" sobre todo en
el sistema educativo público, que los movimientos de izquierda han
infiltrado, para crear un sentido común que naturaliza el
totalitarismo en la percepción de las personas. Llamo a esto,
"pedagogía de izquierda".
La táctica indirecta de ataque al
estado de derecho es la ya mencionada "censura", que
consiste en reaccionar públicamente frente a determinados discursos
con el propósito de descalificarlos y eliminarlos del espectro
público. La forma típica en que esto se hace es la demonización:
no nos ha de extrañar que se califique de "nazi" o "o
fascista" un mero discurso liberal. Esto sólo supone un acto de
retórica, lo grave es que las masas absorben y reproducen este tipo
de comportamiento, una vez que están adiestradas en el pensamiento
único que es la "corrección política".
La censura consiste en la supresión
del libre discurso, inconsistente con el discurso propugnado por el
agente censurante. Los agentes de la censura habitualmente
representan el discurso dominante e intentan eliminar la disidencia a
una forma de pensamiento pretendidamente único y, por lo tanto,
totalitario. La pedagogía moderna es censura, la educación estatal
de los gobiernos progresistas es censura, el discurso mediático es
censura y la corrección política también es censura.
Donde haya censura al libre discurso
individual, no habrá libre ejercicio de la ciudadanía, en tanto la
libertad de discurso sea una libertad individual.
III -El totalistarismo posmoderno:
usurpación del estado de derecho por la cultura total
Los grupos que actualmente atacan al
estado de derecho son los movimientos posmodernos de izquierda que
podemos catalogar y reunir bajo el rótulo de "Marxismo
cultural".
El marxismo cultural es una evolución
del marxismo que redefine el dogma marxista de lucha clases por el de
lucha entre oprimidos y opresores y que sustituye la agenda de
revolución material del marxismo tradicional por un programa de
revolución cultural.
Tanto el marxismo como su vástago son
ideologías totalitarias, formas de discurso orientadas a la
dirección de las masas, autodenominadas fin y conclusión de la
historia, representan una forma de discurso censor, negador de todo
otro discurso, que pretenden erigirse en explicaciones totalizantes
del universo y de la historia de nuestro pensamiento. La doctrina del
comunismo reza "nosotros y no yo": pero una doctrina como
esta supone conclusión de todos los diálogos, así habla la voz del
rebaño, el espíritu de la manada, el alma de la colmena y de la
masa. Esto es censura porque clausura las posibilidades del discurso
por fuera de los discursos legitimados colectivamente, lo cual supone
de plano partir de una retórica que no soporta la revisión de la
lógica, en la medida en que supone lo que debería demostrar, que es
por cierto la estrategia estándar de los progresistas y marxistas
culturales: suponerlo todo y no demostrar nada.
Por lo tanto, el comunismo es enemigo
del estado de derecho, garantía de nuestras libertades individuales,
así como es enemigo de las nociones más elementales de la lógica y
de los requisitos mínimos de la racionalidad, único árbitro que
pueden tener los diálogos humanos.
Yo, como individualista del espíritu
y de la conciencia, como ser racional comprometido con la superación
individual y con la afirmación de mi existencia individual soberana,
me declaro abiertamente enemigo de la mente de colmena, del
cretinismo colectivo que significa la adherencia irracional a un
principio de obediencia plural, rechazo los discursos progresistas
construidos a base de frases comunes, estandarizadas y establecidas
sistemáticamente por una pedagogía de la decadencia: qué se joda
toda la puñetera pedagogía de la nueva izquierda.
IV - La paradoja de la cultura total
Se supone que el marxismo cultural
quiere eliminar las fuentes de opresión cultural y liberar a los
grupos culturales oprimidos de la sujeción a que los someten los
grupos culturales dominantes.
Pero yo veo una flagrante paradoja en
el totalitarismo de la cultura total.
¿Por qué paradoja? Porque este
pensamiento de colmena que es la cultura total, esconde en el fondo
algo opuesto a una concepción total del universo, o sea a concebir
la existencia individual como parte de una totalidad de orden
superior, lo cual no sería para nada inconsistente con un
individualismo cultural, del espíritu, de las ideas que acepte la
necesidad la vida social para la supervivencia.
El pensamiento de colmena oculta en su
núcleo un egoísmo basado en la identificación con el cuerpo y
consiguientemente, como lo hacen todos los que se identifican con su
cuerpo, con la primacía de los intereses asociados a la preservación
de la existencia material, consecuencia lógica del materialismo que
impregna la ideología de la izquierda.
Aunque hable con la voz de la colmena,
aunque piense con el pensamiento de la colmena, el marxista cultural
en su fuero interno considera que la concreción de su capricho
egoísta es más importante que la preservación de la colmena:
simplemente la usa para obtener ventajas frente a los que lo dejarían
atrás en un régimen de comportamiento exterior a la colmena. Porque
sólo puede desear la totalización de la colmena aquel cuyos
intereses sólo se pueden realizar a través de ésta.
Sin embargo, en cualquier momento la
mente del enjambre, que no se controla a si misma sino que es
controlada por la fuente de sus estímulos, puede prescindir de sus
miembros en base a consideraciones instrumentales, como Mao, Lenin y
Stalin prescindieron de la existencia de millones. Porque la
identificación de la existencia con la materia tiene como
consecuencia la prescindibilidad de la vida individual en beneficio
de un sistema material más grande que, como resultante de un
complejo entramado de procesos materiales, no tiene ningún tipo de
conciencia y que, si bien no tiene su auto-conciencia bien puede ser
dirigido, precisamente porque no la tiene, porque todo lo que carece
de consciencia se mueve en virtud de causas externas.
Por lo tanto, la conclusión de la
revolución cultural significa la sustitución de un esquema de
comportamiento anterior, presumidamente opresivo, por un régimen de
comportamiento colectivo y total, sin autoconciencia, controlado
desde fuera.
V - El marxismo cultural no debe
gobernar
Los movimientos posmodernos (la
ideología de género, la censura, la corrección política, el
feminismo) conforman un enjambre, decidido a destruirlo todo por la
promesa de un mundo donde los débiles sean felices, donde los
insectos y los seres de orden superior sean sus iguales. Esto, porque
en el fondo consideran que ser humano consiste en ser un cuerpo
sujeto tan sólo a causas externas.
Aunque los débiles se agrupen en
manadas, aunque formen el grupo más numeroso, aunque quieran usurpar
el lugar que los creadores ocuparon en el pasado, es vano su proyecto
porque los creadores van a erigir monumentos nuevos, porque se van a
sustraer a lugares solitarios donde no pueden alcanzarnos y porque en
sus pensamientos, no pueden ni tan siquiera rozarlos.
El "nosotros" del enjambre
es tan absurdo que no tiene evidencia alguna que lo respalde o lo
justifique, más que su violencia material, que sin dudas puede
contrastarse empíricamente pero que nunca lo legitima frente a la
razón, no hay ningún proceso lógico que demuestre la preexistencia
de la conciencia de grupo por sobre la conciencia individual y previa
a ésta. Supone el instinto enfermo de un débil que no soporta la
certeza de su existencia aislada y sólo puede sobrellevarla
disolviendo su voluntad en un proceso colectivo. Es claro que la
violencia neomarxista ejercida sobre la cultura no resiste una
revisión hecha a la luz de las condiciones mínimas en que es
posible la vida cívica en el marco de un estado de derecho.
Por ello, la vida cívica, como esfera
de las libertades individuales no puede ser gobernada por animales,
ya busquen privilegios, la preservación de su cuerpo o la
realización de dogmáticas fantasías sociales, sin tener en cuenta
las ajenas libertades individuales. Si los miembros de la mayoría
agrupada se comportan como animales, entonces no deben gobernar.
La única existencia de la que podemos
tener alguna evidencia es la que reza "yo, aquí y ahora" y
la única necesidad que atraviesa la existencia aquí y ahora es la
regla moral universal, aquella que todos deben seguir si actúan
racionalmente, nunca la regla del capricho, la regla de la
inclinación emocional o la regla de comportarse como un animal
(claro, qué más da comportarse de cualquier manera si al fin y al
cabo son todos iguales).
Es mejor ser libre con dolor que un
esclavo con placer. E inclusive, el hipotético placer de ser un
esclavo que ofrece el marxismo es dudoso. Además, los hombres no son
iguales.
Los movimientos posmodernos (la
ideología de género, la censura, la corrección política, el
feminismo) conforman un enjambre, decidido a destruirlo todo por la
promesa de un mundo donde los débiles sean felices, donde los
insectos y los seres de orden superior sean sus iguales. Esto, porque
en el fondo consideran que ser humano consiste en ser un cuerpo
sujeto tan sólo a causas externas.
Aunque los débiles se agrupen en
manadas, aunque formen el grupo más numeroso, aunque quieran usurpar
el lugar que los creadores ocuparon en el pasado, es vano su proyecto
porque los creadores van a erigir monumentos nuevos, porque se van a
sustraer a lugares solitarios donde no pueden alcanzarnos y porque en
sus pensamientos, no pueden ni tan siquiera rozarlos.
El "nosotros" del enjambre
es tan absurdo que no tiene evidencia alguna que lo respalde o lo
justifique, más que su violencia material, que sin dudas puede
contrastarse empíricamente pero que nunca lo legitima frente a la
razón, no hay ningún proceso lógico que demuestre la preexistencia
de la conciencia de grupo por sobre la conciencia individual y previa
a ésta. Supone el instinto enfermo de un débil que no soporta la
certeza de su existencia aislada y sólo puede sobrellevarla
disolviendo su voluntad en un proceso colectivo. Es claro que la
violencia neomarxista ejercida sobre la cultura no resiste una
revisión hehca a la luz de las condiciones mínimas en que es
posible la vida cívica en el marco de un estado de derecho.
Por ello, la vida cívica, como esfera
de las libertades individuales no puede ser gobernada por animales,
ya busquen privilegios, la preservación de su cuerpo o la
realización de dogmáticas fantasías sociales, sin tener en cuenta
las ajenas libertades individuales. Si los miembros de la mayoría
agrupada se comportan como animales, entonces no deben gobernar.
La única existencia de la que podemos
tener alguna evidencia es la que reza "yo, aquí y ahora" y
la única necesidad que atraviesa la existencia aquí y ahora es la
regla moral universal, aquella que todos deben seguir si actúan
racionalmente, nunca la regla del capricho, la regla de la
inclinación emocional o la regla de comportarse como un animal
(claro, qué más da comportarse de cualquier manera si al fin y al
cabo son todos iguales).
Es mejor ser libre con dolor que un
esclavo con placer. E inclusive, el hipotético placer de ser un
esclavo que ofrece el marxismo es dudoso. Además, los hombres no son
iguales.
Se supone que el marxismo cultural
quiere eliminar las fuentes de opresión cultural y liberar a los
grupos culturales oprimidos de la sujeción a que los someten los
grupos culturales dominantes.
Pero yo veo una flagrante paradoja en
el totalitarismo de la cultura total.
¿Por qué paradoja? Porque este
pensamiento de colmena que es la cultura total, esconde en el fondo
algo opuesto a una concepción total del universo, o sea a concebir
la existencia individual como parte de una totalidad de orden
superior, lo cual no sería para nada inconsistente con un
individualismo cultural, del espíritu, de las ideas que acepte la
necesidad la vida social para la supervivencia.
El pensamiento de colmena oculta en su
núcleo un egoísmo basado en la identificación con el cuerpo y
consiguientemente, como lo hacen todos los que se identifican con su
cuerpo, con la primacía de los intereses asociados a la preservación
de la existencia material, consecuencia lógica del materialismo que
impregna la ideología de la izquierda.
Aunque hable con la voz de la colmena,
aunque piense con el pensamiento de la colmena, el marxista cultural
en su fuero interno considera que la concreción de su capricho
egoísta es más importante que la preservación de la colmena:
simplemente la usa para obtener ventajas frente a los que lo dejarían
atrás en un regímen de comportamiento exterior a la colmena. Porque
sólo puede desear la totalización de la colmena aquel cuyos
intereses sólo se pueden realizar a través de ésta.
Sin embargo, en cualquier momento la
mente del enjambre, que no se controla a si misma sino que es
controlada por la fuente de sus estímulos, puede prescindir de sus
miembros en base a consideraciones instrumentales, como Mao, Lenin y
Stalin prescindieron de la existencia de millones. Porque la
identificación de la existencia con la materia tiene como
consecuencia la prescindibilidad de la vida individual en beneficio
de un sistema material más grande que, como resultante de un
complejo entramado de procesos materiales, no tiene ningún tipo de
conciencia y que, si bien no tiene su auto-conciencia bien puede ser
dirigido, precisamente porque no la tiene, porque todo lo que carece
de consciencia se mueve en virtud de causas externas.
Por lo tanto, la conclusión de la
revolución cultural significa la sustitución de un esquema de
comportamiento anterior, presumidamente opresivo, por un regímen de
comportamiento colectivo y total, sin autoconciencia, controlado
desde fuera.
III -El totalistarismo posmoderno:
usurpación del estado de derecho por la cultura total
Los grupos que actualmente atacan al
estado de derecho son los movimientos posmodernos de izquierda que
podemos catalogar y reunir bajo el rótulo de "Marxismo
cultural".
El marxismo cultural es una evolución
del marxismo que redefine el dogma marxista de lucha clases por el de
lucha entre oprimidos y opresores y que sustituye la agenda de
revolución material del marxismo tradicional por un programa de
revolución cultural.
Tanto el marxismo como su vástago son
ideologías totalitarias, formas de discurso orientadas a la
dirección de las masas, autodenominadas fin y conclusión de la
historia, representan una forma de discurso censor, negador de todo
otro discurso, que pretenden erigirse en explicaciones totalizantes
del universo y de la historia de nuestro pensamiento. La doctrina del
comunismo reza "nosotros y no yo": pero una doctrina como
esta supone conclusión de todos los diálogos, así habla la voz del
rebaño, el espíritu de la manada, el alma de la colmena y de la
masa. Esto es censura porque clausura las posibilidades del discurso
por fuera de los discursos legitimados colectivamente, lo cual supone
de plano partir de una retórica que no soporta la revisión de la
lógica, en la medida en que supone lo que debería demostrar, que es
por cierto la estrategia estándar de los progresistas y marxistas
culturales: suponerlo todo y no demostrar nada.
Por lo tanto, el comunismo es enemigo
del estado de derecho, garantía de nuestras libertades individuales,
así como es enemigo de las nociones más elementales de la lógica y
de los requisitos mínimos de la racionalidad, único árbitro que
pueden tener los diálogos humanos.
Yo, como individualista del espíritu
y de la conciencia, como ser racional comprometido con la superación
individual y con la afirmación de mi existencia individual soberana,
me declaro abiertamente enemigo de la mente de colmena, del
cretinismo colectivo que significa la adherencia irracional a un
principio de obediencia plural, rechazo los discursos progresistas
construidos a base de frases comunes, estandarizadas y establecidas
sistemáticamente por una pedagogía de la decadencia: qué se joda
toda la puñetera pedagogía de la nueva izquierda.
II - La destrucción del estado de
derecho: la corrección política y la censura
Por lo tanto, cualquier agresión a
las libertades individuales o a las instituciones que las garantizan
es una agresión al soberano, aunque sea realizada por un grupo
mayoritario.
Por ejemplo: el ciudadano de un estado
donde sólo puede decirse lo que permite la censura no es libre, el
ciudadano que tiene que pedir permiso para existir (como ocurre en
los regímenes totalitarios) no es libre y ha sido agredido en sus
libertades individuales él mismo, como el propio soberano del que
forma parte.
La estrategia global de los grupos que
atacan el estado de derecho es erosionar, infiltrar e invertir los
valores culturales que existen al amparo del estado de derecho, para
eliminar la necesidad del derecho y sustuirlo por el totalitarismo,
donde el estado, ya no de derecho sino de facto, usurpa toda la
soberanía que antes era de los ciudadanos.
Digamos que el estado de derecho o
gobierno de la ley, que garantiza nuestras posibilidades de ejercer
nuestra libertad indidual puede ser atacado con tácticas de acción
directa sobre nuestro campo de acción o de reacción frente a la
acción libre.
La táctica directa de ataque al
estado de derecho consiste en adiestrar a los individuos en una
doctrina de agresión e intolerancia hacia el estado de derecho y el
ejercicio libre de los derechos naturales que debe gozar un ciudadano
bajo el amparo de la ley. Esta estrategia se implementa mediante el
adiestramiento en la "corrección política" sobre todo en
el sistema educativo público, que los movimientos de izquierda han
infiltrado, para crear un sentido común que naturaliza el
totalitarismo en la percepción de las personas. Llamo a esto,
"pedagogía de izquierda".
La táctica indirecta de ataque al
estado de derecho es la ya mencionada "censura", que
consiste en reaccionar públicamente frente a determinados discursos
con el propósito de descalificarlos y eliminarlos del espectro
público. La forma típica en que esto se hace es la demonización:
no nos ha de extrañar que se califique de "nazi" o "o
fascista" un mero discurso liberal. Esto sólo supone un acto de
retórica, lo grave es que las masas absorven y reproducen este tipo
de comportamiento, una vez que están adiestradas en el pensamiento
único que es la "corrección política".
La censura consiste en la supresión
del libre discurso, inconsistente con el discurso propugnado por el
agente censurante. Los agentes de la censura habitualmente
representan el discurso dominante e intentan eliminar la disidencia a
una forma de pensamiento pretendidamente único y, por lo tanto,
totalitario. La pedagogía moderna es censura, la educación estatal
de los gobiernos progresistas es censura, el discurso mediático es
censura y la corrección política también es censura.
Donde haya censura al libre discurso
individual, no habrá libre ejercicio de la ciudadanía, en tanto la
libertad de discurso sea una libertad individual.
El estado de derecho es el proceso
resultante, orientado a una cierta forma de vida cívica, que es
resultado complejo y variable en el tiempo de factores convergentes
de naturaleza cívica, territorial, política y cultural
estructurados en forma de instituciones, que son las formas
materiales en que se brinda a los ciuadadanos el amparo de la ley.
Las instituciones son el resultado
fáctico y orgánico, de las formas establecidas por el soberano, en
que se organiza la vida cívica.
En el estado moderno, el soberano es
(al menos en teoría) el pueblo, o la sumatoria de los ciudadanos
individuales.
Por lo tanto, las instituciones son la
forma en que el pueblo, soberano, o conjunto de los ciudadanos
individuales, ha organizado su vida cívica.
Las instituciones son más simples o
más complejas, son más o menos materialmente contrastables (ej, el
poder judicial) o son más bien intangibles como la noción de
"libertad individual".
La base de nuestras instituciones es
el intangible concepto de la "libertad individual", el cual
sin embargo tiene un registro amplio de contrastación empírica o
material en relación a nuestra experiencia psíquica.
D7. DARKLORD – Sacred devastated Forest (pagan black metal)
by Edgard(Lyrics and guitar)
El que quiera apoyar este proyecto, puede suscribirse y seguirme en G+: http://google.com/+EdgardFilosofiayMetalZuluaga
Strange, I see the icy moon collapse
which will be the pleasure of falling enormous joy.
As I understand everything leans tenderly
on the white curve of celestial globes.
Here, under these trees at height,
It come on earth to rest the rain
and I get up from tomb my face,
like a snout whitish teeth.
I repelled everything that breathes …
when I put my hands on your hot skin
at the same time I felt sorry, warmth and torture
and my skin burned by a fiery comet .
Now that the cosmos into chaos collapses,
I feel the last called, which calls me shortly.
Goodbye, it is the end. A song from grave
time slows and gradually stops it.